Lo complicado no era diseñar un yate de 80 metros y 200 millones de dólares, sino asegurarse de llevarlo al mar sin que se dañara.

Imagina vivir en una ciudad serena, ubicada cerca de Rotterdam, donde, al mirar por tu ventana, te encuentras con una maravilla gigante que se erige frente a ti. Se trata de un coloso de 14 metros de ancho y la estatura equivalente a un edificio de tres pisos. Este peculiar evento fue el que experimentaron nuevamente los habitantes de la tranquila localidad de Alphan, en los Países Bajos.

Según lo que reportaron los medios locales ANUNCIO, los transeúntes que se acercaron a uno de los canales que serpentearon por la ciudad fueron testigos de cómo un superyate valorado en 200 millones de dólares, conocido como Work of Lawrence, el dueño del equipo de Fórmula 1 Aston Martin y el jefe del talentoso piloto Fernando Alonso, maniobraba hábilmente para navegar entre los canales estrechos que presentaban distintos tipos de obstáculos.

La megayate -DodeSsey

Feadship, reconocido como uno de los astilleros más prestigiosos del mundo, es responsable de la construcción de este asombroso superyate. Esta magnífica embarcación fue botada desde sus instalaciones en Aalsmeer, donde también se produjo el imponente Plataforma de lanzamiento, de 118 metros de longitud, destinada a Mark Zuckerberg. La travesía por estos laboriosos canales no solo representa un desafío físico, sino que también requiere una experiencia técnica que pone a prueba a todos los ingenieros involucrados en la maniobra y los despliegues de tráfico en las áreas urbanas de paso.

Realizar este tipo de operación no es una tarea sencilla. La meticulosa planificación y la ejecución precisa de cada fase son cruciales. Un solo error en el cálculo o en la maniobra podría poner en riesgo la integridad del casco de una embarcación cuyo valor supera los 200 millones de dólares, además de comprometer la seguridad de las personas involucradas. La épica odisea del Proyecto 714, nombre del yate Walk, fue documentada en un video para el Canal de Navegación Holandés.

Algunas partes de la transmisión fueron especialmente tensas; por ejemplo, el espacio que había entre el casco del superyate y los pilares era apenas unos centímetros. Las estrechas curvas en los canales recordaron a un circuito de Fórmula 1, lo que aumentó aún más la tensión de la travesía mientras se preparaban para el paso al océano abierto.

Proyecto 714 Dejar los astilleros

Si incluso el dinero puede allanar el camino

El Proyecto 714 no es el primer ni será el último megayate en realizar este tipo de travesía, pero la complejidad aumenta notablemente cuando se trata de embarcaciones de gran tamaño, como es el caso del propietario del equipo de Fórmula 1 Aston Martin, cuyo patrimonio personal está estimado en 3.800 millones de dólares, según Forbes.

El trayecto realizado por Jeff Bezos en el Koru desde las instalaciones de Oceanco en Alblasserdam también presentó sus propios desafíos al navegar por canales que eran similares a los que tuvo que atravesar el yate de Lawrence Stroll.

En esta ocasión, el maestro constructor holandés enfrentó un gran problema: un puente ferroviario histórico, construido en 1927, no era lo suficientemente alto como para permitir que los mástiles de 70 metros del Koru pasaran por debajo. Esto llevó a las empresas de construcción a proponer el desmantelamiento temporal del puente para facilitar el cruce del velero.

Sin embargo, según informes del medio local Truuw, la oposición de los vecinos llevó a que el Ayuntamiento rechazara esta propuesta, por lo que el contratista se vio obligado a completar el viaje sin los mástiles, terminando así la construcción del Koru en los astilleros de la compañía en Greenport.

Una mansión flotante

AD ha recogido algunos comentarios de los residentes de Alpan que acudieron a observar el asombroso trayecto del Proyecto 714 mientras se deslizaba por las aguas de sus angostos canales. Frases como «esto es realmente impresionante», «no es algo normal», «el paso más estrecho es impresionante», o «estamos viviendo la alta clase» fluyeron de los labios de los espectadores, resaltando la magnificencia del yate construido con acero y aleaciones de aluminio.

Este lujoso yate está diseñado como una magnífica mansión flotante, concebida para el disfrute y el ocio. Posee cinco cubiertas, cuenta con un club de playa que incluye una piscina en la parte trasera, y presenta un arco afilado que también podría servir como helipuerto. Durante su proceso de fabricación, Feadship prefirió no revelar muchos detalles sobre los dispositivos y acabados internos hasta haber completado las pruebas de navegación a las que ahora está sometido.

Es relevante señalar que, como se menciona en los reportes, este yate incluye un sistema de propulsión híbrido diésel-eléctrico, diseñado para reducir la vibración y mejorar la comodidad de los pasajeros a bordo.

En | Los ultrarricos están cambiando el concepto de las vacaciones con superyates: muchas de esas villas flotantes son verdaderas maravillas.

En | Mantener un superyate es extremadamente costoso. Algunos investigadores han propuesto una idea inusual para los millonarios: donarlos para fines científicos.

Imagen | Feadship, Aston Martin F1