Atraer extranjeros y promover el desarrollo de nacionales en situación de estancamiento.

El año 2024 marcó un periodo positivo para la industria hotelera en España. Después de haber dejado atrás los oscuros recuerdos de la pandemia, el sector turístico ha comenzado a revitalizarse, impulsando una recuperación significativa del turismo en el país. Este renacer se tradujo en un notable aumento de las estadías en hoteles, alcanzando cifras récord como señala la Organización Mundial del Turismo; en total, se registraron casi 364 millones de noches en 2024, lo que representa un incremento del 4.9% respecto al 2023 y niveles aún más altos que los que se habían observado en los años previos a la crisis sanitaria. Pero, al analizar estos resultados en mayor profundidad, destaca un matiz importante: el crecimiento ha sido principalmente impulsado por el turismo extranjero, lo que ha dejado al turismo nacional en un estado relativamente estancado.

En la actualidad, dentro de los hoteles en España, se empieza a notar una mayor presencia de turistas que provienen de otros países, mientras que la afluencia de viajeros locales parece disminuir.

Una dinámica de turismo a dos velocidades. El análisis que ofrece el Instituto Nacional de Estadística (INE) es revelador: durante el año 2024, aunque se reportó un incremento del 4,9% en las estadías hoteleras, este dato enmascara dos realidades distintas que coexisten.

Por un lado, la demanda de turistas internacionales ha crecido de manera exponencial. En contraste, el número de turistas españoles ha aumentado muy poco, con un total de 121.9 millones de noches, lo que representa un crecimiento solo marginal del 0.2% en comparación con el año anterior. Este fenómeno ha causado que el índice de precios de los hoteles suba un 7% anual.

Gráficos sobre el llenado de datos en hoteles ofrecidos por el INE.

¿Existen más datos para considerar? La respuesta es afirmativa. Las cifras del INE afirman la tendencia presentada por economistas como Ángel Talavera en sus publicaciones en redes sociales, basados en los análisis de Oxford Economics y Harver Analytics. Estos análisis ofrecen una visión clara acerca de cómo la brecha entre el turismo nacional y el internacional se ha ido ampliando desde la crisis de la COVID-19, especialmente en los últimos dos años. En términos de datos, la estadía en noches de turistas extranjeros creció cerca del 17%, mientras que la de turistas nacionales se mantuvo casi sin cambios.

¿Cuántos turistas corresponden a estos números? En resumen, España recibió a 116.3 millones de viajeros en total. De esta cifra, 54.3 millones son españoles y 61.9 millones son turistas internacionales. Estos datos revelan dos conclusiones clave. Primero, el creciente peso de las estadías de extranjeros en los hoteles es notable, puesto que sus estancias suelen ser más largas de promedio. Mientras los viajeros internacionales se quedan cerca de cuatro noches, los españoles solo permanecen un promedio de 2.2.

La segunda conclusión indica que el crecimiento en el sector hotelero se sustenta casi por completo en la demanda de turismo internacional. En 2024, el flujo de turistas extranjeros aumentó un 8.22%, mientras que el turismo nacional se estancó, mostrando una ligera disminución del 0.7%. Estos datos sugieren que los españoles están optando cada vez más por vacacionar en el exterior. En 2024, los viajes de españoles al extranjero crecieron un 12.1% en comparación con el año anterior, a pesar de que la ocupación dentro del país se redujo un 2.3%.

Los británicos y alemanes: los reyes del turismo en España. La estadística indica que, entre los turistas internacionales, los provenientes del Reino Unido y Alemania son los más numerosos, representando el 43% del total, es decir, 102.9 millones de visitantes. Además, ambos grupos mostraron un crecimiento en sus visitas durante 2024.

En cuanto a las regiones de España que son más populares entre estos turistas, las Islas Canarias y el litoral mediterráneo destacan notablemente. El archipiélago canario acapara 26.3% de las estadías internacionales, un 5% más que en el 2023. Las Islas Baleares ocupan el segundo lugar con el 23.9% y Cataluña sigue en tercer lugar con un 18.2%. Esta última región también es popular entre los turistas nacionales, junto a Andalucía y la Comunidad Valenciana, siendo Mallorca uno de los destinos más solicitados.

Haga clic en la imagen para acceder al tweet.

¿Qué ocurre fuera de los hoteles? Todos estos datos, provienen de un informe amplio que contempla hoteles, hostales, moteles y pensiones. Además, es importante señalar la situación de otras formas de hospedaje turístico, como campings, alojamientos rurales y apartamentos, que también reflejan un panorama similar en 2024.

Este sector cerró el año con una cifra de noches superior a la del 2023, con un incremento del 3% más. En este contexto, sin embargo, la experiencia de los españoles ha mostrado una disminución del 0.5%, mientras que el turismo internacional creció un 5.8% en las estadías.

Un problema de datos… El récord alcanzado en los hoteles españoles, que se nutre principalmente de viajeros internacionales, no es algo nuevo. Antes de finalizar 2024, la industria ya había señalado una marca histórica en el número de turistas internacionales, lo que reafirma a España como un destino preferido en la escena turística global. Proyecciones de Google y Deloitte apuntan a que, en el futuro, España podría convertirse en el país con la mayor afluencia de turistas hacia el 2040, superando tanto a Francia como a Estados Unidos.

Datos de ocupación en el sector extrahotelero, incluyendo apartamentos y servicios alternativos.

… y los desafíos. No obstante, este crecimiento significativo conlleva importantes retos. El auge turístico, en particular por la llegada de visitantes internacionales con un mayor poder adquisitivo, ha generado un aumento en la oferta de alquileres turísticos

que, a su vez, ha exacerbado la tensión en el mercado inmobiliario en regiones populares como las Islas Baleares, Cataluña, las Islas Canarias y Madrid. En respuesta a esta situación, las autoridades han comenzado a implementar regulaciones para limitar la conversión de apartamentos residenciales en alojamientos turísticos, buscando así equilibrar las necesidades de turistas y residentes.

Los ciudadanos de las áreas más impactadas también han comenzado a alzar su voz. Esto se ha traducido en manifestaciones que exigen un modelo turístico que sea compatible con la vida cotidiana de los residentes. En Islas Baleares, Canarias, Madrid y Cataluña, se han visto movilizaciones activas en este sentido, con algunos residentes protestando de manera llamativa, utilizando pistolas de agua como símbolo de sus reclamos contra el turismo masivo. En el norte de Cantabria, se ha resonado el lema «No queremos ser un destino turístico masivo».

La amenaza latente. El principal desafío que enfrentan los destinos turísticos más relevantes en España es el riesgo de «morir de éxito». Puede sonar exagerado, pero algunas guías de viaje comienzan a señalar a lugares como Mallorca, Barcelona y las Islas Canarias como destinos a evitar en el futuro debido al exceso de visitantes.

De hecho, se ha advertido que, aunque los turistas europeos no están cansados de viajar, tampoco buscan saturarse en los destinos más icónicos a niveles extremos. Los autores de ‘Fodor’s Travel’ han emitido advertencias sobre la creciente insatisfacción que puede surgir si no se gestiona adecuadamente el flujo turístico en estos lugares.

Fotos | Eduardo Bayon Perales (Flickr) Y INE 1 Y 2

En | El turismo de masas contó los días en España gracias a un fenómeno fuera de su control: calor extremo