El Candidato adjunto y expreso del Partido Nacional de Liberación (PLN), Gilberth Jiménez, ha manifestado su oposición a la reelección de Rodrigo Arias para la presidencia del Congreso. Esta declaración ha generado un nivel considerable de atención dentro del panorama político actual, ya que los comentarios de Jiménez apuntan a una búsqueda de cambio y diversidad en los puestos de liderazgo.
La fracción del PLN, durante una reunión celebrada anoche, el lunes, llegó a un acuerdo que incluyó el respaldo a la reelección de Arias. Sin embargo, es significativo señalar que la ausencia de varios legisladores, incluyendo a Jiménez, Carolina Delgado y José Joaquín Hernández, ha levantado algunos interrogantes sobre la solidez de este apoyo. Hernández, en particular, se encuentra fuera del país, lo que ha contribuido a reforzar una atmósfera de incertidumbre en torno a las decisiones dentro de la fracción.
Jiménez, al reflexionar sobre la presidencia de la Asamblea Legislativa, subrayó de manera clara la necesidad de incorporar una perspectiva más inclusiva. «Es importante señalar que la actual compensación en el liderazgo cuenta con una representación mayoritaria de mujeres. Esto no solo ofrecería una mayor dinámica en las discusiones, sino que también promovería un ambiente propicio para buscar consensos y colaboración entre los distintos poderes del Estado. Por ello, creo firmemente que es el momento adecuado para que una mujer asuma la presidencia del Congreso», indicó Jiménez, resaltando la importancia de avanzar hacia una mayor equidad de género en los espacios de toma de decisiones.
Por otra parte, el diputado Carolina Delgado aún no ha comunicado su postura al respecto, lo que agrega un nuevo elemento de incertidumbre en este proceso. Actualmente, Arias cuenta con el respaldo de 16 de los 19 delegados del bloque Verdiblanco, lo que sugiere que, aunque tiene apoyo, no es un camino seguro hacia su reelección.
Para que Arias logre repetir su cargo por cuarta vez como presidente, necesitará reunir un total de 29 votos, un número que podría resultar complicado de alcanzar. Además, la fracción del Frente Amplio (FA) y la decisión ya han dejado claro su rechazo a votar a favor de Arias, lo que añade presión sobre la situación actual y subraya las divisiones dentro del conjunto legislativo.
Es importante hacer hincapié en que desde el inicio del año, un grupo de mujeres parlamentarias ha estado abogando por la necesidad de que una mujer finalmente ocupe la presidencia del Congreso. Sin embargo, hasta el momento, solo Vanessa Castro, del Partido Cristiano Social, ha manifestado su interés y ha puesto su nombre sobre la mesa como posible candidata. Este escenario plantea importantes reflexiones sobre la representación de género en la política y podría significar un cambio significativo en la dinámica de liderazgo en el Congreso.