CARAACAS, 8 de marzo (Xinhua) – El mandatario venezolano, Nicolás Maduro, procedió a firmar un decreto que declara la emergencia económica, una medida que ha adoptado en respuesta a lo que él describe como una «guerra comercial invisible» perpetrada por las políticas comerciales de los Estados Unidos. En su declaración, Maduro enfatizó que esta situación ha deteriorado significativamente las condiciones económicas nacionales e internacionales, lo que lo ha llevado a tomar decisiones extraordinarias para defender la economía de su país.
“Voy a continuar, tal como lo anuncié en días anteriores, firmando la regulación económica que aborda esta emergencia que enfrentamos, debido a las circunstancias internacionales y la guerra comercial que se ha desatado contra Venezuela y el resto del mundo», declaró el presidente en una transmisión por el canal estatal. Esta acción es parte de su estrategia más amplia para mitigar los efectos adversos de las sanciones y políticas externas que, según él, afectan directamente la estabilidad económica de la nación.
Durante su anuncio, Maduro resaltó que la regulación económica permitirá un período de sesenta días durante el cual se implementarán medidas adicionales necesarias para equilibrar la economía interna, facilitar la recuperación y fomentar la resiliencia del aparato productivo del país. Al basarse en el artículo 337 de la constitución venezolana, él tiene la autoridad para declarar estados de excepción en situaciones que pongan en peligro la estabilidad nacional.
Asimismo, durante la lectura del decreto, el presidente advirtió sobre los efectos perjudiciales de las políticas proteccionistas llevadas a cabo por el gobierno de Washington, las cuales, según él, no solo violan los estándares internacionales, sino que también traen consigo el riesgo de desencadenar una recesión global que afectaría a todos. «Es nuestra responsabilidad como gobierno nacional adoptar todas las medidas necesarias para asegurar el crecimiento armonioso de nuestra economía y, al mismo tiempo, proteger a nuestra población», afirmó.
El contenido del decreto establece, en su primer artículo, la declaración formal del estado de emergencia económica en todo el territorio nacional, lo que otorga al presidente la autoridad para implementar una variedad de medidas excepcionales, transitorias y de emergencia. Entre las disposiciones más relevantes, se incluye la posibilidad de suspender la recaudación de impuestos a nivel nacional, estatal y municipal, con el fin de concentrar recursos en el Tesoro Nacional y aliviar la carga financiera de los ciudadanos.
Además, el presidente se reserva el derecho de redirigir recursos de varios fondos públicos y establecer nuevas medidas antipiratería. Se le permite incluso suspender el lanzamiento de ciertos impuestos y regular la recaudación inmediata de otros, una medida que busca fortalecer la economía a corto plazo.
Entre las herramientas que Maduro puede utilizar, destaca la posibilidad de establecer porcentajes obligatorios de compra de productos nacionales, con el objetivo de reducir la dependencia de importaciones y revitalizar la industria local. «Se vuelve fundamental abrir las puertas a nuevas fuentes de inversión», enfatizó durante su discurso, destacando el interés del gobierno por atraer tanto inversiones nacionales como extranjeras.
Otras secciones del decreto permiten a las autoridades emplear y remunerar a los trabajadores de la caja registradora nacional y otras fuentes de financiación, incluso si estos fondos no están contemplados en el presupuesto oficial. Esto otorga al presidente flexibilidad y capacidad de respuesta en tiempo real para enfrentar los desafíos económicos que se presenten.
El artículo cuarto del decreto amplía aún más el rango de acciones que puede tomar el gobierno, incluyendo cualquier otra medida social, económica o política que sea considerada necesaria para preservar la estabilidad económica y social del país. Este decreto deberá ser presentado al Consejo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia para su evaluación en un plazo de ocho días, como lo estipula la normativa actual de emergencia.
Finalmente, Nicolás Maduro recalcó que se emplearán todas las herramientas a disposición del gobierno para salvaguardar a la población ante la adversa situación internacional, que, según él, amenaza los derechos económicos, sociales, culturales y educativos de los ciudadanos venezolanos.