Proyecto Cisneros para modificar la ley de referéndum en Bury

La reciente presentación de una reforma constitucional el miércoles ha generado un intenso debate en el ámbito político, especialmente entre los 25 delegados que la han discutido. Esta propuesta, impulsada por los oficiales de la región de Pilar, busca modificar la ley del referéndum con el fin de permitir consultaciones populares relacionadas con el sistema de pensiones. Esta reforma es vista como un intento de los delegados de responder a las inquietudes de la ciudadanía respecto a las pensiones de lujo.

El plan fue introducido por el político Cisneros en abril de 2023. Durante su exposición, argumentó que los propios ciudadanos deberían tener voz y voto en la decisión sobre lo que él denomina «pensiones de lujo». Esto podría llevar a una modificación del artículo 105 de la constitución política del país, un artículo que actualmente establece las condiciones bajo las cuales se puede efectuar un referéndum.

El artículo 105 menciona lo siguiente:

El referéndum no continuará si los proyectos están relacionados con presupuesto, impuestos, fiscales, financieros, crédito, seguridad, aprobación de préstamos y contratos o actos de naturaleza administrativa.

Tras presentar la propuesta, los delegados llevaron a cabo una votación sobre la admisibilidad de la reforma. Si se aprobara, se formaría una comisión especial encargada de estudiar el proyecto, recibir audiencias y, eventualmente, ofrecer recomendaciones sobre la posible creación de un sistema de compensación. Sin embargo, la votación resultó en un escueto apoyo, ya que solo 16 votos fueron a favor de la iniciativa, con el respaldo de los delegados de los partidos sociales cristianos y de la Nueva República, mientras que 25 legisladores votaron en contra.

Uno de los momentos más destacados del debate se produjo cuando Cisneros cuestionó a la diputada independiente Gloria Navas, quien había señalado que la reforma estaba diseñada para engañar y manipular a la población. «Esta reforma del referéndum es otro discurso para aprovechar la simplicidad de la población costarricense. Aquí, la gente no es estúpida, pero es demasiado buena y es simple, y corresponde a nosotros como delegados proteger el sistema legal costarricense», afirmó Navas, subrayando que debía haber un respeto por la inteligencia de los ciudadanos.

En respuesta, Cisneros defendió su posición, afirmando que él tenía un profundo respeto por la ciudadanía y que no consideraba que fueran «estúpidos», como había mencionado la diputada Navas. «Dime que si conoces a una sola persona que haya acumulado suficientes fondos en su vida laboral como para recibir una pensión de 14 millones de Colones. No existe. Si soy yo, pero eres un defensor de esos gabinetes políticos», replicó Cisneros, enfatizando la falta de equidad en el actual sistema de pensiones.

La discusión alrededor de esta reforma es emblemática de las divisiones que existen en la política costarricense respecto a temas de justicia social y el manejo de los recursos públicos. La respuesta de los legisladores a esta reforma no solo reflejaría su posición política, sino también su entendimiento de la realidad socioeconómica que enfrenta el país y cómo planean abordar las demandas de una población cada vez más exigente.