Si la realidad nos abruma, buscamos comprenderla a través de la ficción.

Una de las primeras acciones que llevaron a cabo muchos españoles al recuperar la corriente eléctrica fue buscar series y películas que abordaran el tema de las fallas de potencia. Lo que ocurrió durante el apagón reciente fue un fenómeno extraordinario, pero también existe una explicación psicológica que podría ayudarnos a entender por qué nos sentimos atraídos por este tipo de contenido. La ficción nos permite explorar y reflexionar sobre realidades complejas, especialmente aquellas que no logramos comprender completamente o que nos parecen fuera de nuestra capacidad del entendimiento.

‘Broady’ sale de eso. En 2022, Movistar Plus+ lanzó ‘Brugón’, una miniserie concebida como un proyecto autoconclusivo que consta de cinco episodios, dirigidos por Rodrigo Sorogoyen, Raúl Arévalo, Isa Campo, Alberto Rodríguez e Isaki Lacuesta. Esta serie parte de un evento catastrófico: una tormenta solar que provoca un apagón global, sumiendo a la humanidad en la oscuridad y sin telecomunicaciones. Cada uno de los episodios reflexiona sobre una fase humana diferenciada frente a la crisis: rechazo, emergencia, confrontación, supervivencia y equilibrio. La serie, con su enfoque realista, se convirtió en una de las tendencias de búsqueda más prominentes tras la reciente falla de energía en España. La audiencia busca ver ficción que, aunque pueda ser extrema, proponga escenarios que parecen posibles e incluso probables si estas situaciones se agravan.

No es el único. Hay muchas otras series que abordan el tema de las fallas de potencia. Una de ellas es ‘Dejó atrás el mundo’ (disponible en Netflix), en la que dos familias enfrentan una misteriosa interrupción de la electricidad tras un ciberataque. En el drama francés ‘El colapso’, se examinan las razonadas pero problemáticas bases que llevaron al colapso de la sociedad, mostrando la desesperación que se genera cuando los elementos básicos de la vida diaria desaparecen. ‘Cero’, la serie más joven de Netflix (Netflix), también se centra en un ciberataque que causa un apagón mundial, analizando las reacciones del gobierno ante este desastre. Todos estos relatos, cada uno con su particular estilo y tono, presentan y navegan por un territorio que parece inimaginable.

Explica lo inexplicable. Las narrativas que consumimos nos ayudan a comprender lo que se encuentra más allá de la lógica: una catástrofe de tal magnitud obliga a la reflexión sobre cuestiones trascendentales, como la existencia misma y nuestra capacidad de entender el mundo. Historias como las narradas en diversas religiones, mitos urbanos, rumores y piezas cinematográficas nos proporcionan marcos que nos permiten definir límites y atar conceptos a lo que consideramos plausible y racional. Aquello que no logramos comprender o que todavía no tiene respuesta nos lleva a conectarnos con producciones como «apagón», que pueden arrojar luz sobre los eventos recientes.

Más allá de las fallas de potencia. Sin embargo, este fenómeno se extiende mucho más allá de los apagones recientes. También discutimos cómo el «cónclave» se acompañó de un gran interés en cines y durante el funeral del Papa; una película, más que cualquier documental, puede explicar mejor la complejidad de estos eventos, ya que abarca las emociones que se entrelazan en tales circunstancias. Y si retrocedemos aún más, podemos recordar éxitos como «Contagio», que, a pesar de haber sido filmada en 2011, cobró relevancia durante la pandemia, ofreciendo una mirada única a situaciones extremas y su potencial impacto en nuestro mundo.

Los Simpson lo predijeron. Por supuesto, es imposible mencionar estos eventos sin pensar en cómo Los Simpson han hecho predicciones sobre lo que ocurrió el día de ayer, donde un colapso masivo llevó a la población a regresar a modos de vida más tradicionales. Este fenómeno, donde la animación legendaria parece tener respuestas lógicas y materiales a través de años de narraciones, sátiras agudas y observaciones profundas, se intersecta con la idea mencionada anteriormente sobre nuestra inclinación a buscar patrones significativos y conexiones entre sucesos, incluso si son el resultado del azar. A menudo, nos apoyamos en historias, series y películas para encontrar sentido en lo que parece caótico.

Me suena. La familiaridad con lo ficticio nos permite contextualizar nuestra realidad. Por lo tanto, al enfrentar el día posterior a un colapso del sistema eléctrico en un país, buscamos en series y películas que nos ayuden a elaborar y asimilar estas experiencias a través de acciones y subtramas que resuenen con personajes familiares. La inmersión en la ficción activa redes neuronales en nuestro cerebro, que funcionan similar a vivir experiencias reales, integrando estas historias en nuestros recuerdos, aunque sepamos diferenciarlas de la realidad. Este proceso nos ayuda a superar situaciones difíciles, proporcionándonos el aprendizaje necesario para afrontar futuros desafíos.

Encabezado | Movistar Plus+

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