La incertidumbre y el cansancio son la nueva rutina de decenas de camioneros varados durante 3 días en la Ruta 32, cerca del peaje de Zurquí, tras el cierre de la vía que conecta San José con Limón.
Entre ellos se encuentra Luis Alfaro, un transportista con 30 años de experiencia que espera la reapertura desde el lunes.
«Estoy aquí desde el lunes, alrededor de las 4:30 de la tarde, desde ese momento, desde ese día, estamos esperando la apertura de la Ruta 32», dijo.
Si este jueves no se activa la vía, Alfaro pasará más de 3 días completos durmiendo en la cabina de su tráiler.
El frío, la falta de baños y el acceso limitado a los alimentos son parte de los problemas que enfrentan.
“Las condiciones aquí son muy difíciles… gracias a Dios la empresa me ayudó con comida, pero no todos tienen esa ventaja”, dijo Alfaro, quien también informó que algunos camiones pudieron circular mientras otros permanecieron detenidos.
«Estamos viendo que algunos suben y otros bajan, y no es para todos, eso es cierto», señaló.
A pesar del compañerismo entre los conductores, el ambiente es de preocupación y agotamiento.
«Mi mujer y mis hijos me llaman todos los días para preguntarme cuándo vuelvo y no sé qué decirles. Estamos encerrados aquí, ni aquí ni allá», añadió.
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) informó hace más de 15 horas que mantiene un monitoreo constante de la zona, aunque no emitió una nueva actualización.
El Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) indicó que las condiciones en el lugar «no son las mejores» y aún lo son no se puede proyectar un horario de aperturadebido a la continua caída de material en el tramo afectado.
Mientras tanto, los camioneros permanecen varados en medio de la montaña, intentando sobrellevar las largas horas con conversaciones entre compañeros, baños improvisados en un desfiladero cercano y la esperanza de que pronto se vuelva a abrir el paso.
«No debería ser así, pero tenemos que aguantar porque es nuestro trabajo», añadió el directivo.
Con información del periodista Gustavo Castro.









