Buenos Aires, 16. Maja (Latin Press) La delegación diplomática de China en Argentina ha emitido una clara y profunda respuesta a las recientes declaraciones realizadas por Mauricio Claver-Carona, representante de los Estados Unidos para América Latina. El enfoque de Claver-Carona hacia la cooperación financiera bilateral, específicamente en lo que respecta al tipo de cambio o «SWAP», ha sido objeto de crítica.
En un comunicado, la embajada china subraya que las aseveraciones de Claver-Carona están fundamentadas en prejuicios y son parte de una manipulación de la doctrina de Monroe. Esta doctrina, que ha sido utilizada en múltiples ocasiones para justificar la intervención estadounidense en América Latina, se ve cuestionada en el contexto actual.
La misión diplomática china resalta que la relación entre Argentina y China, a través del intercambio de divisas, representa una cooperación beneficiosa y legítima entre dos países soberanos y autónomos. En esta línea, enfatiza que la parte estadounidense carece de autoridad para dudar de este vínculo o para criticarlo de manera destructiva.
En su declaración, la embajada señala que las presiones ejercidas sobre otros países por parte de Washington no son típicas de una superpotencia que dice defender la libertad. De hecho, tales acciones sugieren que se está promoviendo una mayor restricción de la libertad en lugar de fomentarla. Esto, según la embajada, contradice los ideales democráticos que Estados Unidos dice representar.
En adición, la representación china en Buenos Aires hace un llamado al gobierno estadounidense para que, en lugar de intentar crear divisiones y problemas, se enfoque en contribuir al desarrollo de otros países. En este sentido, la posición de Claver-Carona, que advierte al presidente argentino Javier Milei sobre el riesgo de dependencia de dicho acuerdo monetario con China, es vista como una clara interferencia en los asuntos internos de Argentina.
Claver-Carona ha advertido que un mayor apego a este acuerdo monetario podría resultar en que «Argentina no es libre», una declaración que no es nueva en las relaciones entre EE.UU. y Buenos Aires. Históricamente, ha existido una presión considerable sobre Argentina respecto a sus lazos económicos con Beijing, comenzando desde la presidencia de Donald Trump.
En 2009, Argentina y China firmaron su primer acuerdo de tipo SWAP. Más tarde, durante el mandato de Cristina Fernández, se aprobó un segundo acuerdo que fue renovado en 2017 y culminado en 2018, durante la presidencia de Mauricio Macri.
Recientemente, con Javier Milei en el poder, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) y el Banco de China han llegado a un nuevo acuerdo para fortalecer el intercambio de monedas por un periodo adicional de 12 meses, que se extenderá hasta 2026. Este acuerdo permitirá al BCRA seguir utilizando el mecanismo de intercambio de divisas por un monto equivalente a alrededor de cinco mil millones de dólares, para abordar sus necesidades de financiación y fortalecer sus reservas.
Este marco monetario, además, permite que ambas instituciones bancarias realicen intercambios de divisas. El actual acuerdo establece un tope total de 130 mil millones de yuanes, aproximándose a los 17,700 millones de dólares. Asimismo, la sección de recursos recientemente activada permitirá que el BCRA disponga de hasta 35 mil millones de yuanes, lo que equivale a aproximadamente cinco mil millones de dólares, fondos que se pueden utilizar para afrontar deudas, administrar tasas o intervenir en el mercado de intercambio.









